Hace pocos días se produjo la certificación de Biden como presidente de Estados Unidos luego de que pocos senadores y representantes se opusieran a la certificación de los votos en los estados donde hubo un evidente y documentado fraude electoral, esto no es sorpresa para los latinos, pero sí algo nuevo para el país que se proclama como la potencia mundial. Dejando eso de lado, ya que es una época triste para los individuos con anhelos de libertad verdadera, la victoria de Biden es a la vez una victoria para China y una victoria para el gobierno de Nicolas Maduro. Los procesos de negociación con el camarada progresista Joe Biden van a facilitar la dolarización del país, provocando que los negocios de las personas pudientes, con influencia y cercanas al (o del) gobierno puedan prosperar, a su vez de la eliminación de sanciones, y la movilización de un capital enorme que se ha visto congelado por 4 años desde la llegada de Trump a la casa blanca. Esto es una victoria para las personas